Con el propósito de acercar nuestra cultura y de promover el talento salvadoreño con distintos pueblos del mundo, nuestra Embajada en Japón apoyó la participación del país en el 22° Intercambio Internacional de Arte en la nación asiática.
En ese espacio se presentó la exhibición de pinturas “Tropical Roots” (Raíces tropicales), una colección creada por la compatriota Tere Schwartzbart.
La muestra está compuesta por once piezas de diversos tamaños, en las que la connacional plasmó diversas frutas propias de nuestro territorio, que son dulces recuerdos que resguarda de su niñez, y que, además, reflejan parte de nuestra identidad, estilo de vida y actividades productivas de nuestro país.
“Viví en una pequeña localidad en Ahuachapán, en donde todos los días podía ver las ventas de fruta, y esa imagen la mantengo viva en mi memoria siempre”, expresa la artista.
En la colección, en la que ocupa la técnica de óleo sobre lienzo, se encuentran imágenes de nísperos, zapotes, mangos y aguacates, con un especial énfasis en los marañones.
Al respecto, la pintora indica que ese protagonismo se debe a que, en buen número de países, nada más están familiarizados y consumen la semilla, pero desconocen el resto del fruto que, en nuestro territorio, también se come o es aprovechado para la preparación de refrescos y helados.
“Mis obras hablan sobre la belleza e importancia de la agricultura salvadoreña, y presentarla en Japón ha sido maravilloso. Muchas gracias por el apoyo”, expresó Schwartzbart.
La exhibición se llevó a cabo en el Museo Metropolitano de Arte de Tokio, y fue apreciada por decenas de personas, quienes estrecharon sus vínculos con El Salvador, por medio del arte y la cultura.
“Por primera vez conozco lo lindo que es el marañón, solo conocía su semilla”, comentaron algunos de los asistentes.
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